
El 8vo Congreso Nacional de Extensión Universitaria desarrollado en la UNSJ en septiembre de 2018 dejó hondas huellas en los corazones de todas y todos los que militamos la Extensión Crítica a lo ancho y largo de la Argentina y Latinoamérica.
Sarmiento dice en su obra maestra que “lo que mata a la Argentina es la extensión” haciendo referencia a lo “incivilizado” de los espacios geográficos de la Argentina: así, esa extensión enuncia también a la “barbarie” de las tradiciones de los habitantes.
Mucha agua ha corrido en nuestro país y la región para darnos cuenta que, en realidad, una de las principales riquezas de todos nuestros territorios y comunidades es, especialmente, esa extensión.
Redoblamos la apuesta y creemos, desde la Nacional y el Territorio, que la mirada extensionista es mucho más que un aula sin paredes: es la construcción de una universidad que sea para todas y todos, una universidad que realmente habite y se problematice desde los territorios.
Acá les compartimos las palabras de una de las conferencias de cierre de este emblemático congreso que nos unió y nos marcó el sur – basta de pensar en nortes – a muchas y muchos de nosotros.
Rector Norberto Caminoa - Universidad Nacional de Chilecito - La Rioja- Argentina (mandato finalizado marzo 2020)
Somos una Universidad del interior - del interior-, es decir, está en el interior de una provincia, lejos de una Capital y tenemos una situación parecida a lo que sucede en el Conurbano. Estamos a 240 km de nuestra –se podría decir madre- Universidad de La Rioja de la cual somos un desprendimiento que se ocupa de un área que requería un grado de atención. Hoy nuestros estudiantes, tal como son los del Conurbano, son, la mayoría de ellos, los primeros estudiantes en sus familias y esto ocurre en estas Universidades que están en el interior de las provincias, alejadas del centro. La Universidad no sólo les está dando la posibilidad de educación, de un ascenso social a aquellos que estudian en ella, sino que les da la oportunidad a la comunidad, a la sociedad de enriquecerse. La posibilidad de tener mejores ciudadanos, mejores profesionales, de tener profesionales que antes no tenían cómo es el caso de la carrera de enfermería que hoy los profesionales están ocupando espacios en los hospitales y en las asistencias de la provincia. La Universidad le está dando posibilidades a las empresas agropecuarias de la región para tomar ingenieros propios de la región que han nacido, que conocen y trabajan en ella; y, en fin, están trabajando y dándole oportunidad a la Universidad de crecer, formarse, ir formando su masa crítica , es decir, formando futuros docentes, futuros profesionales. Con eso estamos enviando jóvenes a perfeccionarse, a doctorarse en Europa, en distintas Universidades mayores con más tradición que la nuestra que vuelven al territorio y enriquecen con sus conocimientos tanto a la Universidad como al territorio.
Estamos trabajando con mucha gente que se dedica a la Extensión Universitaria, tenemos un socio fundamental en nuestra Universidad que es la cooperativa que agrupa 450 -o un poco más - de productores - pequeños y grandes - que están certificados. La cooperativa tiene una bodega grande certificada en comercios justos. Hemos creado un colegio donde comercio justo atiende tanto a los hijos de los obreros o a aquellos jornaleros como a los dueños de las fincas. Un colegio que se ha destacado hoy - contamos con más de 600 alumnos – en donde no hay discriminaciones. Uno de los problemas que pensábamos era cómo integrar diferentes capas sociales en el colegio y esto se logró: esto también es inclusión. Estamos trabajando con la provincia en modificar los formadores - de formadores -, tratando de enseñarles cómo replantear la enseñanza de las ciencias porque la mayoría de nuestros estudiantes vienen a estudiar carreras sociales. Hace más de diez años no hay un ingeniero textil en el país, no salen matemáticos, no salen físicos, ni astrofísicos, y realmente, cuando este país con el sistema de Universidad Pública que nos dio cinco premios nobel a nuestro país, que nos distingue del resto de América Latina, estamos perdiendo estas disciplinas, perdiendo carreras, especialidades. ¿Por qué? porque no les estamos enseñando bien a los jóvenes, y la Universidad se debe involucrar. También es extensión eso.
Estamos trabajando directamente con los pequeños productores enseñándoles con la bióloga a recolectar y a procesar las hierbas y productos con el fin de que puedan hacerlo todos los años en el mismo lugar; tratar de integrarlos en cooperativas para que puedan agregar valor a sus productos y no venderlos en bolsitas de naylon sino ya con un packaging apropiado: esto también es Extensión. La Extensión es una –y lo entendemos así-, es una de las tres patas que conforman la mesa que es la Universidad. Con dos patas la mesa se cae, tiene que haber un equilibrio y una interacción entre las tres. La investigación y la docencia interactúan con la extensión transfiriendo conocimiento y metodologías de trabajo. La gente para hacer extensión primero se forma, se capacita, genera ideas, procesos y productos que después transfieren y que vienen a la sociedad. Eso ocurre tanto en el sistema productivo como en el de salud, como en todo aquello que la Universidad desarrolla. No tenemos todas las disciplinas y hoy es imposible generar todas las disciplinas en un solo ámbito. Entonces, tenemos sociedades y hoy estamos conformando como nunca antes un Sistema Nacional Universitario y transferimos esos conocimientos y esa búsqueda entre nuestras Universidades. Puede ser que La Rioja tenga disciplinas que yo no tengo y requiere mi sociedad y entonces hacemos de nexo y trabajamos en conjunto, eso también es Extensión.